Nuestro entorno cotidiano, nuestro diario vivir, siempre está rodeado de dos categorías que lo clasifican todo, que son parte esencial de nuestro lenguaje, que a donde miremos siempre se encontrarán, ya que toda cosa, toda persona y en general todo ser vivo estará sometido a sus significados. Me refiero a la noción de género, que en nuestro idioma, como en la mayoría, existen dos; que son lo masculino, con su opuesto que es lo femenino.
Tenemos la idea de que estás dos categorías fijas son esencialmente naturales, que siempre han estado ahí y que son incuestionables, Donde el lenguaje solo habría llegado para nombrarlas, por lo que no habrían necesitado un significado, sino que solo un significante. Continuar leyendo «El género y el lenguaje al servicio de la norma»